Mi experiencia profesional

Mi interpretación es que funciona por múltiples mecanismos. Dicen que abrir la boca ayuda a abrir la vagina y la vulva. Puede ser. Pero, aparte de ese, yo identifico, al menos, cuatro mecanismos de acción de canto prenatal y del canto en el parto:

2. El segundo es la vibración mecánica. Las mujeres que en las contracciones de parto cantan, dirigen a diferentes partes de su cuerpo vibraciones que resuenan, a base de cambiar el tono del sonido que emiten. Esta vibración puede ser un mecanismo que se sume a la apertura de los huesos de la pelvis y al cabalgamiento de los huesos parietales del bebé para facilitar el paso por el canal óseo del parto.
3. El tercero es la comunicación madre-bebé. La voz es uno de los medios de comunicación entre madre y bebé intraútero. Y si la madre siente que se esta comunicando con su bebé, eso le ayuda a descargar su responsabilidad en el parto. Le ayuda a darse cuenta de que el parto es cosas de dos. La sensación de que el parto es algo que una tiene que hacer es uno de los enemigos de que un parto sea fluido, suave. Lo ideal en un parto es que te puedas entregar al proceso sabiendo que es algo que hace tu cuerpo, algo que hace tu hijo, algo que se hace en el universo. No algo que tú haces.
4. Cantar te ayuda a mirar hacia dentro. Ese es el cuarto y más importante mecanismo de acción del canto en el parto que yo puedo identificar. Y a mi juicio es el más importante de todos. El parto no es un evento social y en el parto molestan los sonidos, las luces, las palabras, las personas, la educación y la sociabilidad. El parto fluye cuando miras hacia tu interior. Cantar te ayuda a interiorizar.
Mi experiencia personal
Allá por primavera del 2012 yo esperaba el nacimiento de mi hija Laura. Su madre, Marina, es una mujer cerebral, racional, de esas personas en que uno percibe claramente que predomina el cerebro izquierdo. Sus dos hijos anteriores habían nacido uno por cesárea y la otra vaginal en el agua. Yo pensaba que necesitábamos una preparación al parto de algún tipo. Así que le propuse: "¿qué tal si hacemos hipnonacimiento y canto prenatal?". Y ella me contestó: "Vale, hipnonacimiento". Y añadió: "yo no se cantar". Tras varias "negociaciones" aceptó también el canto prenatal. Y como ya vamos teniendo un poco de fama en esto del parto natural, pues ... salimos en la tele.
Y el resultado no fue malo del todo. Marina tuvo un parto bastante rápido: la primera contracción fue a las 00:30 de la madrugada y la última (la del nacimiento) fue a las 4:00. Así que 3 horas y media contando el preparto. Yo diría que fueron dos horas de fase de dilatación y un cuarto de hora de fase de pujos. Y, bueno, cantar, lo que es cantar, ... no cantaba, pero vivió las contracciones de una forma bastante entregada.